Es todo muy Biblico
Da para pensar o simplemente pasar el rato, dado que ahora tenemos todo el tiempo del mundo, o eso dicen por ahí.
Reflexionaba yo esta mañana, epistolarmente por email que una no se puede mover de casa, con el "señor" cura de mi hospital, acerca de cuan bíblicos (para los Cristianos claro, para otros pues no) son los momentos que estamos viviendo.
Se acerca la Semana Santa, por supuesto suspendida. Pero sin hacer de menos, ni restar importancia, y por supuesto sin olvidarnos de las victimas y los que sufren, analicemos la situación.
Para empezar tenemos una plaga llamada Covid-19 que está arrasando con las vidas de muchas personas, pero en este caso en lugar de los primeros, como Dios hizo con los primogénitos, se está llevando a los últimos. Porque no nos engañemos, en esta sociedad virtual de colores que nos hemos creado a medida, los ancianos son los últimos.
Que paradójicamente se están convirtiendo en los primeros, ven ustedes la similutud irónica "Los últimos serán los primeros", dijo Jesús el Cristo. Ya bueno, dudo mucho que nadie quierea ser el primero en estas circunstancias pero lo son, y lo son ahora porque son los más vulnerables con virus o sin virus. Porque igual de solos se sentían y morían, ahora en hospitales, pero antes en sus casas. Solo que ahora son visibles porque llenan cientos de macabros encabezados de prensa, que es lo que más nos gusta, el amarilleo.
Y esto del virus está trayendo consigo uno de los pecados capitales, para mí, más deleznables, la Avaricia. La avaricia y el egoísmo de aquellos que tan sólo pueden pensar en el sí mismo, dejando atrás, ahora más que nunca, la comunidad y la vision humana de conjunto. Y no hace falta que describa quienes son, aquellos a los que el virus al parecer les hace mutar su explendido trasero, ya que necesitan cantidades ingentes de papel para limpiarse su explendido ojo del culo, como diría Quevedo.
Y para rizar el rizo pasaremos esta Semana Santa, tal y como ocurrió en la primera, revisen la Biblia aquellos que no tienen muy claro lo que pasó. Pues bien, decía que pasaremos esos días todos encerrados en casa, muertos de miedo sin saber muy bien que es lo que está pasando ahí fuera, tal y como pasó en la primera.
Como decía al principio, todo muy Bíblico, o será que tengo demasiado tiempo libre?
Veremos quien obra el Milagro...
